La cúpula del ejército sudanés ha vuelto a presentar una oferta base detallada a Moscú, prometiendo acceso a largo plazo al Mar Rojo a cambio de la potencia de fuego que necesita con urgencia en su guerra civil con las Fuerzas de Apoyo Rápido.
Según funcionarios sudaneses citados por el Wall Street Journal y confirmados por informes posteriores, el acuerdo preliminar tendría una vigencia de 25 años y permitiría a Rusia desplegar hasta 300 efectivos y atracar cuatro buques de guerra, incluyendo buques de propulsión nuclear, en Puerto Sudán u otra instalación cercana, a la vez que se asegura el acceso prioritario a las concesiones mineras sudanesas. A cambio, Jartum busca sistemas avanzados de defensa aérea rusos y municiones guiadas entregadas a precios preferenciales, un paquete que podría reforzar rápidamente sus bastiones urbanos y cambiar el equilibrio táctico en las rutas clave que conectan la capital con el Mar Rojo.