Bueno un poco más de chicha, para que luego no digan que solo me quejo de la desarmada y de Navantia. En este caso me llena de orgullo y satisfacción, que los afectados sean los herejes holandeses y una de las joyas de su corona Damen.
El factor tiempo, será ahora la máxima prioridad en la adquisición de equipo militar: "El objetivo principal es la fabricación más rápida posible del producto utilizable por las tropas", escribió el ministro de Defensa Boris Pistorius (SPD) en Abril en una orden del día a sus soldados. Ante la amenaza rusa, la rapidez es la prioridad.
Sin embargo, esto no parece aplicarse al mayor proyecto de construcción en la historia de la Bundesmarine. Iniciado en junio de 2020, para cuatro fragatas F126 y aumentado en dos más en 2024, el valor el pedido se sitúa ahora en poco menos de 10.000 millones de euros.
Según el plan original, la primera fragata debía ser entregada en 2028. Sin embargo, esto no sucederá: a principios de junio, el ministerio informó al Bundestag sobre retrasos significativos y las dificultades financieras del contratista principal, Damen-Schelde-Naval-Werft de los Países Bajos, que construirá los barcos junto con tres astilleros alemanes.
En respuesta a una pregunta de Bastian Ernst (CDU), experto en marina del grupo parlamentario CDU/CSU en el Bundestag, se aclaran ahora los motivos del retraso: «El motivo principal es que el contratista decidió cambiar su software de diseño al inicio del proyecto. Surgieron dificultades durante la ejecución, con las consiguientes repercusiones en el proyecto en su conjunto».
Se quería saber del Ministerio de Defensa qué implicaba esto para la entrega. La respuesta del ministerio de Pistorius fue que incluso la nueva fecha de entrega de 2032, anunciada por el astillero Damen para la primera fragata, era inestable: «Los plazos presentados por el contratista en mayo de 2025 (2032 para el primer buque y 2035 para el sexto) están siendo evaluados exhaustivamente por la autoridad contratante con apoyo externo, por lo que aún no se dispone de una evaluación definitiva de las fechas de entrega».
Y como es habitual, para esta evaluación, el ministerio añadió que se ha establecido un grupo de trabajo con la asistencia de especialistas externos. Hasta la fecha, se han realizado revisiones periódicas del proyecto con el contratista, con la participación de los subcontratistas clave, se ha encargado un rediseño vinculante de todo el plan del proyecto y se ha iniciado una auditoría externa de las herramientas informáticas del contratista. El Ministerio de Defensa mantiene una comunicación constante con todas las partes implicadas en el proyecto, incluido el gobierno holandés. Las medidas adicionales solo se decidirán a la luz de las conclusiones del grupo de trabajo.
Conviene recordad que una vieja conocida durante su mandato, hasta 2019, la entonces ministra de Defensa, Ursula von der Leyen (CDU), abogó por la licitación a nivel europeo del proyecto de armamento y la razón fueron los retrasos en las entregas anteriores y el aumento de costos en el desarrollo de buques por parte de consorcios exclusivamente alemanes. Sin embargo, ahora resulta evidente que estos riesgos no pueden eliminarse ni siquiera con un contratista principal holandés, y que el problema principal reside en la complejidad técnica y organizativa del proceso de desarrollo y adquisición.
Y a todo eso ni pio del crédito "puente" de gobierno de los herejes a Damen, por la "falta de pago" de los alemanes al no cumplirse el programa. Quien lo ibaa decir de los que nos reñían a los sureños no hace tanto y miraban con malos ojos las ayudas estatales.