por Lepanto el Vie Ene 05, 2018 7:39 pm
Como sabéis el pasado septiembre fue la botadura del Furor, que curiosamente no llevaba instalado el puente de mando, desde hace unos días ya lo tiene instalado, no está nada mal, algo más de cuatro meses para hacerlo. Pero ha sido gracias a un Poltergeist o fenómeno extraño similar, ya que sin que se sepa como, el puente se traslado solo desde el taller donde se construyó hasta el muelle de armamento a flote en donde esta amarrado el buque.
Los trabajadores ante la poca información dada por la dirección de la empresa, y para que no volviera a moverse, o se lo llevará el viento, lo anclaron con gran empeño al suelo del muelle, y ahora finalmente corona el buque.
Esperemos que fenómenos paranormales de esta categoría no afecten a las dos construcciones australianas, ya sería mala suerte perder al único cliente que tenemos por estar el astillero hechizado. Mientras la Armada Española, aguanta mares, vientos, conxuros e meigallos.
Sr. Presidente de Navantia, si nos lee o se lo cuentan, es una vergüenza que los trabajadores de uno de sus astilleros, retrasen sine día la botadura de un buque como sucedió con este durante varios meses, más vergüenza es que tengan que mover el puente del buque a escondidas, y mucho más que se instale curiosamente a los pocos días de pagarles a la plantilla unos atrasos. No son capaces de controlar el astillero y así nos luce el pelo, la diferencia está en que cualquier otra empresa ya habría despedido a los responsables, y lo más seguro que cerrada dadas sus perdidas económicas que no son soportables en un entorno industrial normal.
Pero en este caso todos los españoles pagamos la fiesta a escote.