Autorizada la adquisición de ocho nuevas corbetas (NGC) por un importe de 4.500 millones de euros, en el 2016 cuando se empezó a hablar de estas nuevas corbetas se hablaba de siete. Serán de nuevo diseño con capacidad de realizar ataques SSM ofensivos, operaciones de guerra antisubmarina, defensa naval local, MIO y operaciones VBSS. Aunque el RFI de 2016 sugiere que las entregas de las corbetas comiencen en 2023, no parece factible en este momento.
La eslora de los barcos no superará los 120 metros, la manga y el desplazamiento no se mencionaron en el RFI. La tripulación estará compuesta por 21 oficiales y 137 marineros. Tendrán una autonomía de 4.000 nm a una velocidad económica sostenida. Velocidad máxima de más de 27 nudos, y la velocidad máxima sostenida será de más de 25 nudos.
La operativa será hasta el estado del mar 4, el tránsito estado del mar 7 y capacidad de supervivencia hasta estado del mar 9. Se espera que los NGC sirvan en la marina durante más de 25 años.