por Lepanto el Lun Mar 01, 2021 9:35 am
El gobierno canadiense en junio de 2010, presentó un documento "Stratégie nationale d’approvisionnement en matière de construction navale" (SNACN), que citaba los costes a 30 años, y en principio daba una cifra de 30.000 millones de dólares canadienses.
A continuación en 2011, el astillero Irving, fue seleccionado para construir 15 fragatas, a un costo estimado en 26 mil millones de dólares canadienses (7.800 millones de euros en ese momento]. Y el primer buque debía entregarse en 2020 a más tardar. Pero nada salió como estaba previsto y ahora no los verán antes de 2031.
Según lo planeado, se trataba de elegir un modelo de fragata, preferiblemente probado, y luego adaptarlo a las necesidades canadienses, ya sabemos quien ganó, pero el
el proyecto de ley fue reevaluado a 60 mil millones de dólares canadienses antes de impuestos.
Ahora la preocupación es que la fragata Tipo 26 no está operativa en ninguna parte ni siquiera en la Royal Navy. Y la construcción del primer ejemplar destinado al Canadá no comenzará antes de 2023 ... Por lo que el parlamento y la RCN y la prensa, ya hablan de entrega a principios de la próxima década, 20 años después de la publicación del documento de adquisición de buques.
Esto se hizo publico en un programa de radio Canadá, donde dijeron que la cosa era peor aun, citando el informe oficial de la oficina presupuestaria del Parlamentario (PBO), presentado la pasada semana, por lo que el costo estimado de las 15 fragatas ha aumentado de 26.000 millones de dólares canadienses a 77.300 millones de dólares canadienses, "debido a importantes retrasos en la construcción y al aumento de peso de las ahora más grandes fragatas, más alto de lo esperado. "
“Estamos seguros de que nuestra estimación es muy, muy realista. Creemos que este es un escenario que es plausible a condición de que no haya cambios adicionales en el diseño de los barcos por parte del Ministerio de Defensa”, explicó su autor, Yves Giroux que es el Parliamentary Budget Officer desde 2018 en el Canadá. Que también cita que a partir de ahora, es probable que cada año adicional de retraso aumente la factura en 2.300 millones de dólares canadienses.
Sin embargo, Defensa cuestiona la evaluación del informe. “Encontramos que las grandes diferencias entre nuestra estimación de costos y la de la PBO se deben principalmente a que la PBO incluye el impuesto provincial a las ventas y pone un mayor énfasis en los costos relacionados con el aumento de peso”.
En su informe, el Sr. Giroux estimó lo que costaría seleccionar un modelo diferente al Tipo 26. Y dijo que construir 15 FREMM reduciría el presupuesto en 6.000 millones. Y la elección de las fragatas británicas Tipo 31e sería aún más económica ya que solo costaría 27.500 millones, más o menos el presupuesto previsto para 2011. Pero que las capacidades militares no serían las mismas.
Siguió diciendo de que no hay duda de que el Ministerio de Defensa canadiense revisará sus planes. Si bien “en este punto, elegir un nuevo modelo causaría una pérdida económica significativa para la industria de construcción naval de Canadá y para quienes trabajan en ella. Además, lanzar un nuevo proceso competitivo no garantizaría que se opte por un nuevo modelo y que sea a menor costo”, argumentó.