Ya es público que la construcción del primero de los 12 nuevas caza minas para Bélgica y Holanda comenzará en Bretaña dentro de dos años. El contrato, por un valor de casi 2.000 millones de euros, se notificó el 22 de mayo al consorcio belga Naval & Robotics, formado por las empresas francesas Naval Group y ECA Group. A partir de 2024, estos nuevos buques del programa MCM (dirigido por Bélgica para las dos naciones) comenzarán a suceder a los actuales de la clase tripartite (CMT), construidos en la década de 1980 a través de un programa conjunto de Bélgica, Francia y Holanda.
Estos futuros barcos, incorporaran un sistema completamente robótico para la detección, clasificación y neutralización de minas, con este tipo de herramientas, triplican la operatividad de los que van a suceder. Van a ser usados como buques madre para estas máquinas, cuyo objetivo es aumentar la eficiencia de la caza de la mina con operaciones más rápidas, al tiempo que limita las intervenciones humanas cerca de las amenazas. Serán totalmente diferentes de los que van a sustituir, frente a los 51,5 metros de eslora por 8,9 metros de manga y 615 toneladas de desplazamiento, sus sucesores serán mucho más grandes, 81,4 metros de eslora y una manga de 17 metros (15,5 en la línea de flotación), con un desplazamiento de 2730 toneladas.