El Parlamento croata votó este pasado viernes a favor de reintroducir el servicio militar obligatorio, proyecto de ley presentado el pasado mes de junio. Croacia se une así a un grupo de unos diez Estados europeos que mantienen el servicio militar obligatorio, en diversas modalidades (Finlandia, Suecia, Dinamarca, Lituania, Letonia, Estonia, Austria, Grecia y Chipre).
El objetivo es fortalecer la capacidad defensiva del país, en un contexto marcado por el aumento de las amenazas globales y la guerra en Ucrania. Un total de 84 diputados (de los 151 escaños del Parlamento) aprobaron las enmiendas a la ley de defensa, mientras que 110 modificaron la ley sobre el servicio en las fuerzas armadas.
El servicio militar obligatorio se abolió en 2008, un año antes de unirse a la OTAN, centrándose en la profesionalización del ejército. Sin embargo, ahora consideraron que la situación geopolítica actual requería el restablecimiento del entrenamiento militar básico para fortalecer la capacidad defensiva del país. "Estamos presenciando un aumento de diferentes tipos de amenazas... que requieren capacidad de respuesta y eficiencia por parte de la comunidad en su conjunto", declaró esta semana a los diputados el ministro de Defensa, del partido conservador gobernante HDZ. "Ante cualquier amenaza, la defensa del país es crucial", afirmó.
Unos 18.000 jóvenes serán llamados a filas cada año para realizar un curso de formación de dos meses a partir de los 18 años, a partir de principios de 2026. Las mujeres estarán exentas, mientras que los objetores de conciencia tendrán la opción de completar tres o cuatro meses de servicio civil, incluso formando parte de equipos movilizados para responder a desastres naturales. Los reclutas recibirán 1.100 euros al mes, aunque no se ha especificado la cantidad para quienes opten por el servicio civil alternativo. Quienes hayan completado el servicio militar tendrán una ventaja al solicitar empleo en la función pública