"La inmensidad de la mar tiene otra gran ventaja, y es que otorga el elemento esencial para cualquier operación anfibia: la sorpresa. Ni siquiera con satélites es sencillo encontrar a una fuerza naval en medio de un gran océano. Solo para cubrir el mar de la China Meridional permanentemente, se determinó en 2001 que harían falta 138 satélites. Evidentemente, hay países que han mejorado esta capacidad, pero otros muchos no, y la mar sigue siendo el mejor medio en el que esconder una poderosa fuerza terrestre. Es más, aunque algún satélite detectase una fuerza anfibia, esta podría estar a más de 300 millas de esa posición un día después, lo que supone un área de cerca de 300 000"
Me quedo con este comentario y arrimo el ascua a mi sardina.
Si el mar es tan "sorpresivo" ¿por qué no utilizar aviones turbohélices embarcados? ¿qué más da, si siguen siendo un vector que es tan difícil de detectar?.